Principio activo Valeriana

Valeriana
Nombre científico:Valeriana officinalis L.
Familia: Familia del espino cerval

¿Qué es la valeriana?

Si pide un tranquilizante a base de plantas o un somnífero, se suele recomendar primero la valeriana. Es la hierba más conocida para la relajación, el equilibrio, la calma y el sueño reparador y es una de las plantas medicinales autóctonas más populares. Al mismo tiempo, el aprecio que se le tiene va mucho más allá de la de un mero tranquilizante. Ya en el siglo XVII se consideraba un gran remedio para los nervios. Incluso se utilizaba para la ansiedad, pero sobre todo para tratar los trastornos del sueño.
Durante mucho tiempo, el té de valeriana fue considerado EL remedio para los nervios, especialmente los del sexo femenino.
Así lo atestigua el frasquito de valeriana como tranquilizante en los bolsos de las damas de siglos pasados.
El pastor Kneipp escribió: «¡Todos los tipos de afecciones nerviosas, ya sean calambres o dolores, requieren valeriana!»

¿Qué nos dice su nombre?

Su nombre ya revela el efecto curativo que se le atribuye a esta hierba. El término «Valeriana» deriva de la palabra latina «valere», que significa sentirse fuerte y sano. Y no es de extrañar: después de todo, un sueño saludable y unos nervios de acero son requisitos esenciales para una sensación general de bienestar. 

Officinalis en el nombre siempre indica que la planta se utiliza con fines medicinales. Así se suele distinguir de los demás representantes de este género de plantas. La subfamilia de la valeriana cuenta con unas 350 especies diferentes. Solo una especie de todas ellas, la Valeriana officinalis, es una planta medicinal reconocida en Europa. Sin embargo, algunos parientes también se usan como plantas medicinales en otros continentes, sobre todo la Valeriana edulis en Norteamérica y la Valeriana jatamansi en Asia.

Su nombre vulgar, hierba de los gatos, indica una singularidad. El rizoma, en concreto, desprende un olor peculiar, que también se conoce por las tinturas de valeriana. Los aceites esenciales, que se concentran principalmente en la raíz de valeriana, son los responsables de este olor. Aunque muchas personas lo encuentran bastante desagradable, atrae especialmente a los gatos. Es posible que se parezca mucho a las feromonas.

¿Qué aspecto tiene la valeriana y dónde se puede encontrar?

La Valeriana officinalis es originaria de Europa. Esta planta herbácea, que crece hasta 150 cm de altura, se encuentra en bosques caducifolios húmedos, a lo largo de los bordes de los caminos y en las riberas de los ríos en Europa, así como en zonas templadas de Asia. Sus pequeñas flores crecen en inflorescencias en forma de umbela, de color blanco a rosa. Florecen en junio y julio.

¿Para qué se utilizaba tradicionalmente esta planta medicinal?

Para la elaboración de tés y medicamentos, se utilizan los órganos subterráneos, que se secan con cuidado a un máximo de 40 °C. La raíz de la valeriana consta de un rizoma cilíndrico con numerosas fibras de un dedo de largo comprimidas en forma de nido. En relación con la altura de la planta, el rizoma es muy pequeño. Si se desentierra con cuidado una planta y se lava el sistema radicular, le recordará a una barba larga al ver los numerosos hilos de las raíces. Se puede imaginar lo bien arraigada que está esta planta en el suelo. Además, las plantas vecinas proporcionan un gran apoyo, ya que la valeriana casi siempre aparece en grupo. Por ello, que las flores, el tallo y la zona de las hojas no parezcan muy estables no influye demasiado en su firmeza. Las hojas de la valeriana son pinnadas con cinco a once pares de subhojas estrechas. Estas irradian una fuerte tensión con sus puntas y bordes aserrados oblicuamente.

Por muy inestable y tensa que parezca la hierba, la raíz y el apoyo mutuo consiguen enraizarla. En general, la presencia de Valeriana officinalis en la naturaleza irradia salud, fuerza, calma, apoyo, arraigo y anclaje. «Estar enraizada» es, por tanto, la esencia principal de la valeriana. Esta hierba medicinal tiene una naturaleza muy revulsiva, especialmente para las personas con tensión nerviosa y que necesitan conectar con la realidad. 

Se trata de una planta medicinal ideal para personas sobreestimuladas, nerviosas, hipersensibles, con excesiva actividad mental, poco sueño, falta de conexión con la realidad y vida emocional descontrolada. Las personas que están indefensas, a merced de sus emociones, que carecen de paz interior o que sufren estrés nervioso entran en un estado de tensión. Este suele asociarse a trastornos nerviosos del sueño e inquietud nocturna, así como hipersensibilidad y desequilibrio durante el día. Para estas personas, la valeriana es el mejor remedio.

¿Cómo funciona este tranquilizante a base de plantas?

En la actualidad, diversos estudios se acercan cada vez más a aclarar su mecanismo de acción. Las investigaciones han demostrado que las diversas sustancias producen el efecto global. Un principio activo conocido es el ácido valerénico, por ejemplo, pero hay muchos otros implicados. En conjunto, todas sus sustancias influyen en la transmisión de información en el cerebro. Es algo similar a lo que ocurre con los medicamentos sintetizados químicamente. Los objetivos son, entre otros, los receptores del neurotransmisor GABA en las sinapsis de las neuronas del sistema nervioso central. La actividad de este mensajero garantiza, entre otras cosas, que no todos los estímulos que llegan a nuestro cerebro se transmitan y alcancen nuestra conciencia.

Los somníferos sintéticos y otros tranquilizantes, como las benzodiacepinas y los anestésicos, aprovechan el mismo objetivo, pero su efecto es mucho más fuerte. Sobre todo, fuerzan el sueño, mientras que los tranquilizantes a base de plantas solo favorecen la somnolencia y, por lo tanto, pueden regular ligeramente los trastornos del sueño. Tradicionalmente, la raíz de valeriana se ha utilizado como tranquilizante para tratar diversas dolencias relacionadas con los trastornos del sueño, la ansiedad y la tensión. En estudios clínicos, se ha comprobado también este efecto calmante y soporífero. Por ello, los medicamentos que contienen valeriana se utilizan como tranquilizantes para la ansiedad nerviosa y para favorecer el sueño.

Los medicamentos que contienen valeriana están disponibles en forma de tinturas, es decir, gotas, o como comprimidos recubiertos o grageas. Estas últimas tienen la ventaja de que no se aprecia tanto su intenso olor. No obstante, también se utilizan infusiones de valeriana o medicamentos que combinan varias hierbas medicinales.

Ventajas de los medicamentos a base de plantas

La valeriana, gracias a su efecto soporífero, es una buena ayuda para conciliar el sueño y también propicia un sueño reparador y saludable. Por ello, es un ingrediente muy útil en numerosos remedios compuestos a base de plantas que relajan y favorecen el sueño. Sin embargo, la toma de estos medicamentos no provoca un mayor cansancio durante el día. En la dosis terapéutica habitual, los preparados de valeriana suelen tolerarse muy bien.

A diferencia de muchos somníferos químicos, no se ha observado dependencia, habituación ni efectos de «resaca», es decir, cansancio al día siguiente, con el uso de preparados de valeriana. Obviamente, el efecto de los tranquilizantes a base de plantas es mucho más suave que el de los tranquilizantes químicos.

¿Existen efectos secundarios, contraindicaciones o interacciones con otros medicamentos?

En principio, siempre es posible que se produzcan hipersensibilidades concretas o reacciones alérgicas a los principios activos de las plantas. Sin embargo, si se utiliza como es debido, no hay que temer efectos adversos. Solo pueden producirse efectos secundarios leves, como náuseas y malestar estomacal. No hay indicios de efectos al interactuar con otros medicamentos. 

No obstante, si se ingiere una sobredosis de raíz de valeriana, se producirán efectos adversos como fatiga, molestias gastrointestinales, opresión en el pecho, temblor en las manos y mareos que, sin embargo, también desaparecen al poco rato. 

Todas las sustancias calmantes pueden afectar a la capacidad de conducir y manejar maquinaria, pero no tiene por qué ser así. Además, hay que tener en cuenta que dormir poco también puede tener un efecto muy perjudicial sobre estas capacidades.

Debido a la falta de estudios clínicos en mujeres embarazadas y en periodo de lactancia, los medicamentos que contienen valeriana en altas dosis (fitoterapia) no deben recomendarse concretamente a estas mujeres.

¿Cómo se dosifica la valeriana?

La dosis depende de si la raíz de valeriana se combina con otros principios activos. En el caso de los monopreparados de plantas para la tensión nerviosa, se suelen recomendar de 400 a 600 mg de extracto hasta tres veces al día. En el caso de los trastornos del sueño, debe tomarse una dosis de 400 a 600 mg durante las primeras horas de la noche y luego otra dosis entre media hora y una hora antes de acostarse.

¿Se puede combinar la valeriana con otras hierbas medicinales?

Existen varios monopreparados con extracto puro de raíz de valeriana en el mercado. Sin embargo, suele combinarse con otras plantas medicinales calmantes para intensificar su efecto. Están disponibles, por ejemplo, el lúpulo, la melisa, la pasiflora y la hierba de San Juan. En la farmacia encontrará medicamentos ya preparados que combinan lo siguiente con la valeriana:

  • Hierba de San Juan, pasiflora
  • Melisa, pasiflora
  • Lúpulo, melisa 

Medicina natural con raíz de valeriana

La valeriana se utiliza tanto en fitoterapia, es decir, en forma de hierbas medicinales o en infusiones, como en homeopatía. En este último caso, se emplea sobre todo en tintura madre o en valores bajos. Los ámbitos de aplicación son similares:

Valeriana

La que calma Ayuda a lo siguiente:

  • Cambios de humor
  • Irritabilidad
  • Problemas para dormir
  • Calambres
  • Debilidad
  • Opresión

Valeriana

La que calma

  • Calmante y relajante
  • Complementa el efecto de la hierba de San Juan
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